Racing pasó por arriba a Colón en el Cilindro pero no supo como reflejarlo en el marcador; Newell’s venció a Velez en el Amalfitani y quedó primero en el campeonato, a la espera de que juegue Lanús.
Racing arrancó como hacía rato no podía. Con paciencia y un buen circuito de juego, el equipo de Zubeldía lo pasó por arriba a Colón durante todo el primer tiempo. Con el visitante desconcertado, y un Camoranesi y Villar bien despiertos, Racing hizo todo para irse al entretiempo arriba en el resultado pero con un Vietto impreciso, raro en él, no pudo traducir el volumen de juego creado en goles.
Racing tiene variantes y tiene con qué, el segundo tiempo, con la salida de Villar y el ingreso de Fariña, tomó más protagonismo De Paul y, saliendo un poco más de contra, el local encontró el gol tan ansiado. Linda jugada que arranca desde Camoranesi, con un buen centro de De Paul que la baja Vietto de cabeza para que entre una vez más el ex-campeón del mundo para romper el cero con un derechazo en el que nada tuvo que hacer el arquero de Colón de Santa Fé. Las cosas se acomodaban en el Cilindro con el 1 a 0 que permitía soñar una vez más con alcanzar el tren de los de arriba.
Dicen que los goles que no se hacen se pagan luego eso le pasó a Racing que desperdició varias jugadas claras del gol. En una de las pocas que tuvo en el partido y faltando cinco minutos para que termine el partido, Moreno y Fabianesi conectaron un centro desde la derecha y se clavó el injusto empate en Avellaneda, dejando a los locales con sabor a nada.
Antes, en Liniers, Newell’s había derrotado a Velez por 3 a 1 con goles de Tonso, el paraguayo Cáceres y Urruti para la visita, que fue superior al “Fortín” y quedó como único lider del torneo, aunque falta que juegue Lanús. El empate transitorio para Velez, que jugó con suplentes, lo marcó Rescaldani.
Apenas terminado el partido, la desesperación abrazó a todos los que se encontraban en el Amalfitani. Iván Bella, jugador de Velez, se desplomó en el suelo; mientras los veintidós jugadores y el árbitro pedían desesperadamente por los médicos y la ambulancia por su auxilio. Cuando se temía lo peor, el volante de 23 años reaccionó al subir a la ambulancia en la que fue trasladado al hospital. “Es un cuadro pre epilépitco. Iván tuvo una convulsión.” señaló el médico Angel Vanneli horas más tarde, para despúes tranquilizar al mundo del fútbol y avisar que el jugador ya se encontraba “totalmente normal” y evolucionaba favorablemente.
