Luego de la detención de varias decenas de barras armados que se disponían a enfrentarse con armas de fuego y armas blancas previo al partido ante Unión de Santa Fé, partido que fue suspendido, se especula que Independiente juegue sin público lo que resta del torneo.
Las dos facciones de la barrabrava de Independiente, la que comanda “Loquillo” Rodríguez y “Bebote” Alvarez se habían declarado la guerra y, horas antes del partido, la policía logró detener a decenas de barras que se disponían a enfrentarse a los tiros por los beneficios económicos, políticos y simbólicos del liderazgo en la tribuna.
Luego de que la Aprevide decidiera que el encuentro ante Unión de Santa Fé se suspendiera, quedaron para principios de la semana en una reunión en donde se decidirán cuáles son los pasos a seguir y que medidas de prevención se aplicarán de ahora en más en los partidos que dispute el club de Avellaneda.
Los integrantes de la Aprevide se juntarán con el Secretario de Deportes, Alejo Rodríguez y de la reunión también participará el presidente del club, Javier Cantero, y representantes de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Entre todos intentarán consensuar una medida con el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires. Allí, y ante la imposibilidad de controlar a ambas facciones de la barra y de brindar garantías, debatirán la posibilidad de que Independiente juegue sin público en su estadio hasta fin de año. Incluso, comenzó a instalarse otra alternativa aún más radical: que los hinchas no puedan concurrir al Libertadores hasta mediados del año que viene.
