Franco Casco, joven de 20 años proveniente de Florencio Varela, fue desaparecido en Rosario hasta que su cuerpo fue hallado en el Río Paraná. Antes de su desaparición estuvo detenido en una comisaría rosarina.

Franco Casco I

Días atrás, la justicia de Santa Fe se expidió de manera contundente afirmando que, en tanto el último lugar en el que se lo vió a Franco Casco con vida fue en la comisaría 7ma de Rosario, la caratula debe ser “desaparición forzada de personas” e instó a que el caso sea investigado por la Justicia Federal.

La misma jueza que decidió el traspaso, Roxana Bernardelli, ordenó oficiar al gobernador de Santa Fé, Antonio Bonfatti, para que se investigue la “probable comisión de faltas” del personal de la seccional 7ª.

“No se cumplió con el protocolo de búsqueda de paradero; ni se controló a la policía. Nada hicieron cuando supieron que había estado en la comisaría. Cuando la familia llegó a los medios de comunicación comenzaron con ciertas medidas. Apanowicz derivó la investigación a la propia policía acusada por la desaparición; y dejó perder filmaciones de la comisaría. Tampoco advirtió que le tomaron el pelo porque no le entregaron el teléfono del que se fotografió a Franco en la seccional, donde se lo ve severamente golpeado”, enumeró la magistrada en sus fundamentos.

Franco Casco IV

Franco Casco salió el lunes 6 de octubre a las 23 para tomar un tren de Rosario a Retiro, adonde iba a visitar a su tía: el joven “nunca llegó”. El martes 7, la tía realizó la denuncia en la comisaría 20, donde le indicaron que debían esperar 48 horas para iniciar la búsqueda.

Al no tener noticias de su hijo, el padre de Franco viajó el miércoles 8 a Rosario para buscarlo, y luego de preguntar en las estaciones de trenes y ómnibus, se dirigió a la comisaría 7ma., donde le indicaron que había estado detenido en esa seccional. “El subcomisario le dijo al padre que estuvo detenido el lunes 6 a la noche por desacato (resistencia a la autoridad), y se lo puso en libertad por falta de antecedentes el martes a la noche”, indicó a Télam la madre del joven, Elsa Godoy.

Tres semanas más tarde, y mientras se realizaba una marcha pidiendo su aparición, apareció su cuerpo flotando en el Río Paraná, en proximidades al Parque España, en Rosario.

Franco Casco II

A diferencia de lo sucedido en el caso de Luciano Arruga; Elsa Godoy, la madre de Franco Casco, fue recibida en las últimas horas por la Procuradora General de la Nación, Gils Carbó; y la presidenta Cristina Fernández de Kirchner hará lo mismo por la noche. En este sentido, el hecho de que su desaparición haya ocurrido en una provincia cuyo gobernador es opositor al gobierno no debe soslayarse.

Vale la pena recordar que la familia del joven – desaparecido y asesinado por policías de Lomas del Mirador – sufrió ¡durante 5 años! la desidia e indiferencia por parte del Estado: nadie se acercó a ellos, nadie les brindó ningún tipo de solución y fueron inexplicablemente investigados por la misma justicia que debía de encargarse de dar con el paradero de su propio familiar.

Que Luciano Arruga haya desaparecido bajo las narices del gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, y en manos de su policía explica, en parte, el tratamiento diferencial del tema; pese a ello, la única constante que se mantiene en ambos casos resulta ser la misma: la criminalización y el hostigamiento de los sectores populares a lo largo y ancho del país.

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