Tras trece horas de debate, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley por el cual se estatiza el sistema ferroviario nacional. A favor votaron el kirchnerismo y casi todo el arco opositor.

choque II

Con el respaldo de los votos positivos de 223 legisladores, 4 votos en contra, 7 abstenciones y 23 diputados que no participaron de la votación; la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley para la reestatización de los trenes.

Los bloques que apoyaron el proyecto fueron: el Frente para la Victoria, Nuevo Encuentro, Movimiento Popular Neuquino, la Unión Cívica Radical, el PRO, el Socialismo, el Frente Renovador y la Coalición Cívica, entre otros.

En contra: los diputados del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) y Victoria Donda (Libres del Sur),

Se abstuvieron: cuatro legisladores del GEN, uno de Unidad Popular, una de Proyecto Sur y un miembro de la UCR.

“Con esta ley volvemos a tener el manejo absoluto de las vías. Con ésta aprobación se caen de hecho todas las concesiones, que serán revisadas, porque el Estado volverá a tener el manejo de las vías, el Estado tendrá el control de la totalidad de las vías”, aseguró Juliana Di Tulio, del Frente Para la Victoria (FPV).

“Este proyecto logra un balance con un Estado que invertirá en la infraestructura necesaria mientras que le permite al capital privado competir en la operación de manera sana”, señaló Federico Sturzenegger, miembro del PRO.

Néstor Pitrola, del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) aseveró, por su parte, que el proyecto “privatiza el sistema de ferrocarriles” ya que “consagra la participación pública y privada en la prestación y operación de los servicios ferroviarios y habilita la renegociación de los contratos de concesión, además de mantener el sistema de tercerizaciones”.

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