Como si estuvieran sobre un ring de boxeo, la CGT y el elenco gubernamental se miden, ensayan fintas y amagan a tirar golpes mientras esperan que suene la campana.

Schmid

Luego de semanas advirtiendo sobre la proximidad de un paro nacional, uno de los titulares de la central obrera confirmó efectivamente la medida de fuerza pero reconoció que “todavía no tiene fecha”.

“Está decidido un paro de 24 horas. Seguramente el Comité Central Confederal va a debatir, el Consejo Directivo ha tomado esa determinación, lo que no está todavía precisado es la fecha”, aseguró Juan Carlos Schmid en diálogo con Radio Continental.

En esta línea, el gremialista adelantó que la semana próxima tendrán reuniones con funcionarios del gobierno: “El jueves nos recibe el ministro Prat Gay y a posterior seguramente habrá un encuentro con el Ejecutivo”.

Por último, pasó línea por los principales reclamos: “Desde abril que convocamos a la protesta. Tenemos reclamos que abarcan la caída del empleo y el poder adquisitivo, el tema de los jubilados, ganancias. Le dieron respuesta con celeridad a otros sectores y nos preocupa que la economía no arranque”.

Más allá de los intentos de seguir tensando la cuerda para negociar en una mejor posición con Mauricio Macri y compañía, los máximos dirigentes de la CGT saben que el tiempo se les escapa: la presión por parte de gremios y sindicatos – incluso de quienes no están adheridos a la central – es cada vez mayor.

“Tiene que haber un paro nacional en octubre, las condiciones están dadas. La conducción de la CGT sabe que tiene que haber un paro en octubre”, aseveró Sergio Palazzo de “La Bancaria”. “Generalmente uno faculta a la conducción para que elija el momento de hacer el paro. Per cuando uno observa que el gobierno reconoce 120 mil empleos formales menos y a eso se le suman los empleos informales, bueno… las condiciones para tomar la medida de fuerza están dadas”.

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