El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dio detalles de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), con datos correspondientes al segundo y tercer trimestre de 2016.

El organismo que dirige Jorge Todesca sigue sin enviar “buenas señales” en torno al proceso de crecimiento de la economía argentina y, mucho menos, en lo que respecta al intento de alcanzar la meta gubernamental de “Pobreza Cero”.

En el total de 31 aglomerados urbanos relevados por el INDEC, los sectores más ricos expandieron su participación en el ingreso total frente a una disminución de las franjas más pobres.

  • El 10% con mayores ingresos acaparó el 31,5% del total, mientras que el decil más pobre recibió 1,2% del total.
  • El decil con más ingresos recibió en el trimestre julio-septiembre ingresos 25,6 veces mayores a los del 10% de menores recursos. En el segundo trimestre esa brecha fue de 23 veces.
  • La mitad de la población que declara ingresos, gana mensualmente menos de $8.000, lo que significa un monto inferior al salario mínimo vital y móvil, que en septiembre de 2016 se ubicaba en $7.560, pero desde enero subió a 8.060 pesos.
  • La brecha se incrementa cuando se analiza el ingreso per cápita por grupo familiar. ¿Por qué? Debido a que los hogares más pobres tienen, por lo general, un mayor número de integrantes que los más ricos. El decil de hogares de mayor poder adquisitivo tuvo un ingreso per cápita de $22.045, un 32,8% del total, frente a $1.016 per cápita del 10% de menores ingresos, que acapararon tan solo 1,5% del total de ingresos.
  • La mitad de los hogares más pobres en la Argentina tiene ingresos que no superan los $ 15.700 por mes. Este conjunto comprende a un universo de 11,9 millones de personas.

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