A través de un comunicado, el organismo defensor de los derechos humanos denunció la represión sufrida por la comunidad originaria por defender sus tierras.

“Amnistía Internacional repudia la represión contra el pueblo mapuche por parte de Gendarmería y de la policía de Chubut en el marco del reclamo de los pobladores de tierras ancestrales que actualmente están en disputa con el grupo empresarial Benetton”, aseguraron en un escrito difundido en su página web.

“La comunidad mapuche de Cushamen, un departamento de la provincia de Chubut, en marzo de 2015 decidió volver y recuperar su territorio ancestral en donde hoy está la estancia Leleque de la compañía multinacional Benetton, que tiene cerca de un millón de hectáreas en la Patagonia Argentina”, contaron desde la organización.

“Pese a que una orden judicial, dictada por el juez federal Guido Otranto, ordenó liberar el corte del tren turístico La Trochita, lo cierto es que el 10 de enero en un contexto de creciente criminalización de la protesta y particularmente de estigmatización del pueblo mapuche, alrededor de 200 gendarmes realizaron un operativo cerrojo, clausurando todos los accesos a las tierras en las que permanece establecida la comunidad Cushamen”, agregaron.

“La comunidad relató los hechos de violencia y represión que padeció: golpes, palazos, tirones de pelos contra mujeres, y corridas a los niños y las niñas de la comunidad. Este tipo de accionar resulta inadmisible. El Estado debe rendir cuentas por el maltrato y abuso de la fuerza dirigido a mujeres y niños. Además se concretaron detenciones contra miembros de la comunidad y aliados”, denunciaron luego.

“Amnistía Internacional manifiesta máxima preocupación ante la magnitud de los hechos y los preocupantes antecedentes en relación a los ataques contra la comunidad mapuche. Además llama al Estado nacional y provincial a investigar a los responsables y prevenir futuros actos de represión”, concluyeron.

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