Los secretarios generales de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) y de la Argentina Autónoma (CTAA) acordaron los términos de la unificación.

Primero fue la CGT y ahora serán las dos CTA: el gobierno de Mauricio Macri logró unificar al sindicalismo argentino luego de varios años de rupturas y distanciamientos.

La Central de los Trabajadores Argentinos (CTA), que comanda Hugo Yasky, y la Central de los Trabajadores de la Argentina Autónoma (CTAA) , dirigida por el estatal Pablo Micheli, convinieron “la fusión o unificación” de las dos entidades gremiales en 2018.

El primer paso será la convocatoria a comicios nacionales de renovación única de autoridades y convergerán en un plenario conjunto para elegir comisión provisoria el 9 de febrero.

“Se reunificarán en una única conducción el año próximo. Deliberaremos por separado el 8 de febrero y, al día siguiente, convergiremos en un gran plenario nacional conjunto”, adelantó Yasky.

“Hay un retroceso del sindicalismo, por lo que este año debe ser de movilización y lucha. En febrero se definirá un plan gremial en defensa de las paritarias y los convenios colectivos y en rechazo del intento de usar el movimiento obrero como muñón a partir de un gobierno y un Ministerio de Trabajo que ofician solo de Gerentes de Recursos Humanos de los grupos económicos”, agregó.

Por último, el gremialista no ahorró críticas para con la CGT: “A partir de su inacción, en el corto plazo se producirá una divisoria de aguas en el movimiento obrero con un reagrupamiento de las organizaciones, traspasando las fronteras gremiales para aplicar un plan de acción que resista el intento de llevar el país a una situación pre-sindical”.

Comentarios

comentarios