En horas de la mañana del miércoles, los trabajadores de la fábrica de plásticos Mascardi votaron en asamblea un “paro por tiempo indeterminado con permanencia en planta”. Hay negociaciones.

La relación entre los empresarios, el gobierno y la CGT se quebró en la última semana debido a la catarata de despidos que se produjeron desde fin de año hasta aquí pese al compromiso de mantener los puestos de trabajo.

Al camino emprendido por los trabajadores gráficos despedidos de AGR-Clarín se le sumaron los trabajadores de la fábrica de plásticos Mascardi: decidieron tomar la planta luego de que se efectuaran 40 despidos.

La situación de conflicto viene desde hace un tiempo: a principio de año, la empresa despidió a un tercio de los empleados pero, conciliación obligatoria del Ministerio de Trabajo mediante, debió reincorporarlos. Sin embargo, tras el vencimiento de la medida, volvió a suceder lo mismo.

Los dueños esgrimen una “baja de las ventas” para despedir a los trabajadores; los delegados, por su parte, denuncian intentos de “reducción de costos, flexibilización laboral y contratación precaria”.

Tras una audiencia con las autoridades para intentar destrabar el conflicto, las negociaciones retomaron el rumbo: la empresa accedió a reincorporar a los despedidos de la última semana y a charlar sobre las anteriores cesantías.

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