Los primeros minutos del partido entre el “millonario” y el conjunto “cervecero” fueron intensos y entretenidos.

Los dirigidos por el “Muñeco” Gallardo lograron ejercer un cierto dominio de la pelota pero no así del ritmo frenético del juego: Quilmes se paró bien de contra y, en cuanto recuperaba la pelota o aprovechaba algún error del rival, se lanzaba con todo al ataque.

El equipo visitante tuvo, de esta forma, dos chances claras de gol donde respondió bien el arquero Augusto Batalla. Del lado del local no hubo mucha profundidad pero, sin embargo, contó con la oportunidad de gol más palpable: un centro cruzado y un cabezazo erróneo de un defensor visitante terminó con la pelota estrellándose en el travesaño.

El último cuarto de hora fue todo de River. El “Cervecero” perdió toda iniciativa y sorpresa de mitad de cancha para adelante y el conjunto “millonario” prácticamente lo acorraló. Dos tiros de Nacho Fernández desde afuera del área fue lo más peligroso del local en este pasaje.

El segundo tiempo también arrancó intenso. Alario aprovechó una falta en la puerta del área para sacar rápido y dársela a Driussi: este definió mal ante el arquero y se perdió una gran chance para abrir el marcador. Inmediatamente contestó Quilmes: Andrada se escapó solo ante Batalla pero no pudo con él.

Cuando la visita volvía a complicar a la defensa local, Mora peleó una pelota en ataque, tiró un centro que Driussi bajó y Alario, en posición adelantada, mandó al fondo del arco para poner el 1 a 0.

A cinco del final y con la visita jugada al ataque, los de Marcelo Gallardo manejaron con eficacia un contragolpe que Lucas Alario terminó concretando en la red para el 2 a 0 final.

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