Londres volvió a amanecer con la noticia de haber sido blanco de otro ataque terrorista en el corazón de la ciudad, esta vez, de tinte islamófobo.

Un atacante en una camioneta aprovechó que un nutrido grupo de personas salía de una de las grandes mezquitas de la zona de Finsbury Park, se subió al pavimento y arrasó con los peatones que circulaban por allí: hay un muerto y varios heridos.

“Condenamos este horrorífico ataque terrorista perpetrado contra gente inocente en Finsbury Park. Tuvo como blanco a londinenses inocentes, muchos de los cuales estaban terminando de hacer sus rezos por el sagrado mes del ramadán”, aseveró Sadiq Khan en un comunicado.

“Esto parece ser un ataque deliberado a una comunidad particular, como sucedió en Manchester, Westminster y el Puento de Londres. Es, también, un ataque a nuestros valores en común, la tolerancia, la libertad y el respeto. Terrorismo es terrorismo, sea cual sea la narrativa que lo inspire”, remató.

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