La tranquilidad de Lionel Messi luego de unos últimos años con bastante presión mediática sobre sus espaldas contrasta, al menos en esta pretemporada, con la de su amigo Neymar.

El brasileño está en boca de todos ante los rumores crecientes de que dejará el Barcelona: son varios los que indican que el jugador tiene casi todo arreglando con el PSG francés.

En Miami, donde el equipo realiza las prácticas de preparación para la temporada, la cosa se le fue de las manos: se retiró del entrenamiento luego de un enfrentamiento con su compañero Nelson Semedo.

Ante la mirada de Ernesto Valverde, el crack se enojó con el defensor portugués, que se le había pegado para intentar marcarlo. Inmediatamente comenzó un forcejeo con algunas piñas en el medio y la situación no terminó peor porque Javier Mascherano y Sergio Busquets lograron frenarlo.

Tras ello, Neymar se sacó la pechera, la tiró al piso, pateó una pelota contra el travesaño, otra afuera de la cancha y se encaminó a los vestuarios sin dirigirle la palabra a nadie.

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