Pasadas las 22, los resultados oficiales ya arrojaban un panorama oscuro para el kirchnerismo: el triunfo del gobierno a nivel nacional era contundente y, para colmo, también se quedaban con la Provincia de Buenos Aires.

En ese contexto, Cristina Fernández de Kirchner salió a “reconocer” la derrota pero de un modo particular: erigió a su espacio como el “bastión” de la oposición a Mauricio Macri.

  • “Unidad Ciudadana ha sumado en estas elecciones más votos que en las PASO. Hemos sido capaces de sumar votos. Hemos sido capaces de crecer a pesar de que nos hemos enfrentado a la más enorme e inédita concentración de poder de la que se tenga memoria desde la restauración democrática. Y debemos estar orgullosos de esta construcción, porque el resto de las fuerzas opositoras no han resistido el avance del oficialismo. Y nosotros sí hemos crecido”.
  • “Sólo Unidad Ciudadana ha crecido y emerge como la oposición más firme a este gobierno. Pero no estamos solos. Hay también en otras provincias, con claros y firmes liderazgos políticos, con lo que las oposiciones firmes y claras han avanzado en todo el país”.
  • “La sociedad, los argentinos y las argentinas, han elegido qué modelo de oposición quieren. Y no podemos dejar de señalar que nosotros nunca criticamos ni desprestigiamos a otras fuerzas opositoras, porque creemos en la necesidad de la unidad de las distintas fuerzas políticas que creen que este modelo político y social de ajuste solamente pueda causar dolor a la inmensa mayoría de pueblo”.
  • “No hemos nacido nunca como una fuerza televisiva. Siempre hemos sido una fuerza nacional y popular. Unidad Ciudadana ha venido para quedarse; Unidad Ciudadana sabe que el voto recibido es un voto fundacional, una semilla de esperanza política y la vamos a regar todos los días”.

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