La búsqueda es, a esta altura, contrarreloj: pese a que los expertos suponen que en el submarino aún tienen aire y alimentos para sobrevivir algunos días más, la desesperación de no poder encontrarlos pese a la gran cantidad de ayuda internacional gana terreno.

La nave, que perdió contacto con la base en la mañana del miércoles cuando se trasladaba de Ushuaia a Mar del Plata, está intentando ser localizada por los Estados Unidos, Reino Unido, Brasil, Francia, Alemania, Perú, Chile, Uruguay y Colombia. En total se encuentran disponibles 16 medios aéreos y 31 navales para rastrillar un área de operaciones de 482.507 kilómetros cuadrados.

La base de Comodoro Rivadavia se convirtió en el centro de operaciones de los operativos de búsqueda del ARA San Juan, perdido, según se estima, al sur del Golfo San Jorge a una distancia cercana a las 200 millas: desde allí operan principalmente profesionales, marines y miembros de la Armada de los Estados Unidos.

“Se está ante un acontecimiento extraordinario que tiene que ver con toda la operación para la búsqueda y rescate del submarino. Hace dos días se transportó carga de Estados Unidos, vinieron al aeropuerto de Comodoro submarinos que se dirigen por control remoto, cámaras para el rescate de personas, cámaras para descomprimir la presión, sondas y mucho más equipamiento”, explicó el administrador del puerto “Antonio Morán”, Fabio Cambareri, a “La Nación”.

Vale la pena recordar que en los últimos días hubo dos novedades que durante algunas horas alimentaron la esperanza del hallazgo pero terminaron generando controversias y enojo entre familiares, autoridades y miembros de la Armada Argentina.

La detección de siete comunicaciones que se presumían que eran del ARA San Juan, y que fueron confirmadas sin verificación por el Ministerio de Defensa de la Nación, así como también la información de que al menos desde tres buques que trabajan en la búsqueda se escuchó un ruido que podría pertenecer al submaerino terminaron siendo desestimadas y sólo aportaron a la confusión y consternación general.

En las últimas horas circuló una versión de que un objeto había sido hallado a 300 kilómetros de la costa a la altura de Puerto Madryn, y a 70 metros de profundidad. Sin embargo, ni las autoridades militares y gubernamentales confirmaron si se trataba del submarino perdido.

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