Este último jueves la Argentina asumió la presidencia del G20 luego de una ceremonia en el Centro Cultural Kirchner (CCK) que encabezó el propio Mauricio Macri.

Ahora, para el segundo compromiso, el gobierno montó un fuerte operativo de seguridad para custodiar a los participantes del encuentro – mayormente ministros de finanzas y presidentes de bancos centrales – que se desarrolla en el Hotel Llao Llao de Bariloche.

Ante el temor gubernamental de que se sucedan protestas de mapuches, dirigentes de la oposición, de la izquierda o sindicatos, decidieron desplegar alrededor de 1.500 efectivos de seguridad.

En esta línea, el Ministerio de Seguridad de la Nación a cargo de Patricia Bullrich montó un “comando unificado” con efectivos de la Policía Federal, Gendarmería, Prefectura y Policía de Seguridad Aeroportuaria.

Además destinaron para el operativo detectores de explosivos, lanchas equipadas con alta tecnología, perros de búsqueda y equipos GEOF.

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