Nadie lo esperaba: ni los romanos, ni los catalanes. Aunque ya en el Camp Nou los italianos habían demostrado que podía complicar a los locales, era difícil imaginar un desenlace como el que ocurrió en el “Estadio Olímpico”.

Roma le ganó 3 a 0 al Barcelona, igualó el global 4 a 4 y, gracias al gol de visitante, alcanzó las semifinales de la Champions League, instancia que no alcanzaba desde 1983/84.

Los medios europeos, especialmente los italianos y españoles, reflejaron lo sucedido en sus tapas con crudeza:

El diario catalán “Sport” fue uno de los más despiadados al catalogar la caída como “Fracaso sin excusas”. Desde sus páginas se habló de “un partido lamentable” del Barcelona y se criticó con rigor al entrenador Ernesto Valverde, por plantear “un partido defensivo y no saber reaccionar”.

“Marca”, uno de los más importantes de la península ibérica, se enfocó en dos eliminaciones: por un lado, la del Barcelona en Roma; por el otro, la del Manchester City de Pep Guardiola, un ícono catalán, en tierras inglesas.

Para “Mundo Deportivo”, “La caída de Roma” tuvo el ruido del derrumbe de un imperio: calificaron al Barcelona como un “equipo irreconocible” y advirtieron que, por tercer año seguido, el Camp Nou se queda sin semifinales de la máxima competencia a nivel europeo.

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