La Corte Suprema de la India reactivó una discusión que preocupa a la sociedad de dicho país: el Taj Mahal, monumento centenario, está cambiando de color por culpa de la polución y las autoridades no hacen nada para remediarlo.

A lo largo de los últimos años ha ido adquiriendo un tinte amarillento que lo aleja de la blancura que irradió desde su construcción. “Ahora está verde y negro”, señaló uno de los magistrados  en el fallo.

Los jueces indios M.B. Lokur y Deepak Gupta intimaron al gobierno local para que dé respuestas en el transcurso de una semana: quieren un plan de acción para preservar el edificio construido en el siglo XVII por el emperador Shah Jahan.

Según los expertos, el Taj Mahal está sufriendo trastornos por el smog que aqueja al país asiático. Además, sostienen que los insectos que escapan de la contaminación del Río Yamuna dejan manchas verdes en sus paredes, agravando los problemas iniciales.

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