El cantante y compositor de la mítica banda norteamericana Aerosmith salió con los tapones de punta contra Donald Trump, actual presidente de los Estados Unidos.

La polémica estalló luego de que la canción “Livin’ On The Edge” sea reproducida en Charleston. A partir de allí, y a través de una nota de su abogado, Steven Tyler le prohibió al mandatario que pase sus canciones en sus encuentros y mitines políticos.

“El señor Trump crea la falsa impresión de que mi cliente le dio consentimiento para usar su música y hasta que está de acuerdo con su presidencia. El señor Trump no tiene derecho a usar el nombre, la imagen o la voz de nuestro cliente, sin su expreso permiso”, sentenció el letrado.

El propio músico rompió el silencio y escribió en Twitter: “Esto no es sobre demócratas versus republicanos. No dejo que nadie use mis canciones sin mi permiso. Mi música es para causas, no para campañas políticas. Vengo luchando desde antes de que esta administración gobierne para que se protejan los derechos de los escritores de canciones”.

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