A pesar de que el Ministerio de Educación de la Nación asegura que es prioridad vacunar a los docentes para que las clases presenciales vuelvan en marzo y que las autoridades de la Ciudad de Buenos Aires reafirman una y otra vez que los chicos regresarán a las aulas el 17 de febrero pese al veloz crecimiento de la curva de contagios, los gremios docentes no son tan “optimistas”.
“Es prematuro hablar de presencialidad, más aún teniendo en cuenta el fracaso de la experiencia de escuelas burbujas escolares que se organizaron en la ciudad a partir de octubre”, sentenció Eduardo López, secretario adjunto de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) y dirigente de CTERA.
“Los gobiernos prefieren resolver el problema de la presencialidad a resolver el verdadero problema que es el de la conectividad“, disparó luego el gremialista en diálogo con Página 12.
“Acá hay un tema de inversión educativa, un millón de chicos perdieron contacto con la escuela y, frente a esto, vos tenés dos soluciones: que vayan a la escuela y se contagien o proveerlos de computadoras y conectividad. Cuesta menos poner una sombrilla que darle computadoras a los pibes”, remató.
