La ola de contagios provocada por la variante Ómicron superó todas las previsiones pero, al menos por ahora, la tensión sólo está puesta en las guardias médicas y los centros de testeo.
“Estamos viviendo un crecimiento grande de casos, hace una semana teníamos 7.500 casos semanales, hoy estamos en 12.300 contagios semanales, es un número muy alto“, afirmó esta mañana Horacio Rodríguez Larreta desde el centro de testeos ubicado en el barrio de Chacarita.
“De 600 camas para cuadros graves que hay en el sistema público, sólo hay 66 ocupadas, esto equivale a apenas el 11% de la capacidad”, explicó luego el jefe de gobierno porteño para mensurar el impacto que generó hasta ahora.
Y, de cara a lo que se viene, apuntó: “La tasa de contagiosidad, el famoso R, está empezando a amesetarse, a bajar: la semana pasada estaba en 1.3 y ahora está en 1.25, es una baja pequeña pero tenemos que consolidarla, para que los casos dejen de subir. Por el momento estamos testeando a más de 50.000 personas por día, muchos días esa cifra es más de la mitad de lo que se testea en el país”.
Por último, el ministro de salud porteño, Fernán Quirós, remató: “La experiencia internacional es que la ola de Ómicron tiene ascenso rápido y empieza a bajar, es imposible anticipar la duración, esperamos que sea menos duradera que las anteriores“.
