A través de un decreto publicado en el Boletín Oficial, la administración de Alberto Fernández ordenó que los empleados públicos no asistan este jueves y viernes a las oficinas y desempeñen sus tareas a distancia con el objetivo de optimizar el uso de la energía eléctrica ante la ola de calor que atraviesa buena parte del país.

Vale la pena resaltar que el Instituto Malbrán, los diversos componentes del sistema de salud, las fuerzas de seguridad, el área de migraciones y los bancos continúan con su actividad habitual sin trabajo remoto.

Asimismo, se confirmó que el gobierno nacional negocia con las cámaras empresarias para que las compañías del sector productivo reduzcan su consumo de energía durante los próximos tres días en un intento por evitar otro apagón masivo como el del martes pasado.

“El gobierno está llevando adelante un diálogo profundo y minucioso con conglomerados de empresas para que esta disminución del uso de la electricidad durante estos días se lleve adelante”, ratificó dijo la portavoz de Presidencia de la Nación, Gabriela Cerrutti, en conferencia de prensa.

“Estamos hablando con la UIA (Unión Industrial Argentina), con la UIPBA (Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires), con el IPA (Industriales Pymes Argentinos), con Came (Confederación Argentina de la Mediana Empresa), con la Cadena Textil Indumentaria, con la Federación Maderera, la Cámara de la Industria del Plástico, la Cámara del Calzado y Adimra (Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina)”, especificó luego.

Y remató: “Son todas organizaciones que reunen a una cantidad de empresas que son las que más consumen electricidad en la zona, sobre todo, del Gran Buenos Aires. Y son las que se están comprometiendo a llevar adelante, ellas mismas, este tipo de disminución del uso mientras dure esta situación de riesgo que presenta la alta demanda que ya sabemos que va a ocurrir y que va a tener un pico este mediodía y en los próximos días. De los 28.000 Mw de demanda que hay, 10.000 Mw corresponden a los grandes usuarios y a las grandes empresas. Por lo tanto, una reducción en ese sector es realmente lo que va a ayudar a que el sistema pueda funcionar y pueda hacer frente a la demanda, más allá de que puedan suceder contingencias”.

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