La noticia de que un proyecto del Consejo General de Educación de la Provincia de Buenos Aires en el que se contemplaba flexibilizar ciertos aspectos de la cursada para bajar el nivel de repitencia y favorecer que los chicos y las chicas de secundaria no dejen la escuela generó polémica esta semana: finalmente el proyecto no se votó y las autoridades bonaerenses salieron a aclarar que no iba a regir en 2023.
Más allá de esto, el jefe de gabinete de ministros de la Ciudad de Buenos Aires, Felipe Miguel, fue el primero en salir a cargar contra la posibilidad de que ello se apruebe en territorio bonaerense: “La Ciudad de Buenos Aires no eliminará la repitencia ni flexibilizará las condiciones para pasar de año en la secundaria como plantea la Provincia de Buenos Aires“.
“Esta medida busca invisibilizar la tragedia educativa que provocaron los dos años de encierro desproporcionado y sin clases en la Provincia de Buenos Aires“, agregó por su parte Soledad Acuña, titular del Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires.
“Quieren tomar un atajo para no reconocer que fracasaron en generar nuevas oportunidades para que los chicos puedan aprender”, agregó la funcionaria y también precandidata a jefe de gobierno por Juntos por el Cambio.
