Para desactivar la promesa de paro general y tener un fin de año un poco más “calmo”, el gobierno de Mauricio Macri se sentó a negociar con la CGT y sectores empresariales el pago de un bono y “un mecanismo con intervención de las autoridades” ante un despido sin causa.

El titular del Ministerio de Producción, Dante Sica, admitió que todavía están definiendo la “letra chica” del acuerdo: “La idea del bono es que sea compensatorio y no remunerativo en dos cuotas, en principio englobaría al sector privado. Hay una paritaria abierta en el sector público, así que hasta que el público no cierre sus paritarias, solo compete al sector privado”.

Queremos que sea obligatorio para todos los sectores privados, pero trabajaremos en los casos particulares de las empresas que no lo puedan afrontar“, explicó luego ante el reclamo público y airado de varios empresarios.

“Estamos haciendo la redacción del decreto. En muchos casos los mismos gremios planteaban que podía haber algún tipo de flexibilidad. Vamos a hablar con el sistema financiero para ver si hay algún tipo de financiación de corto plazo para las empresas que no lo puedan pagar. Queremos trabajar después sobre los casos particulares”, subrayó.

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