El arquero de San Lorenzo recuperó su libertad luego de pasar casi un mes y medio en el Penal de Ezeiza acusado de encubrimiento agravado. Tuvo que reconocer su íntima amistad con Mazzaro y asegurar que no entorpecerá la investigación e informará de su paradero en caso de conocerlo.
40 días pasaron desde aquel 1° de abril en que, luego de atajar para San Lorenzo ante Newell’s Old Boys de Rosario por la séptima fecha del torneo argentino, Pablo Migliore fuera detenido y trasladado al Penal de Ezeiza por el delito de encubrimiento agravado del barrabrava de Boca Maximiliano Mazzaro, acusado de cometer un crimen en 2011 y prófugo de la Justicia.
Pasaron varios abogados y también tres declaraciones: la realizada en el día de ayer le abrió las rejas. El arquero de San Lorenzo reconoció su amistad con Mazzaro e, incluso, dijo que la noche del crimen ayudó a que se escape; utilizando a su favor el artículo 277 del Código Penal exime de responsabilidad criminal en el delito de encubrimiento a parientes y amigos íntimos del autor del hecho principal. En función de demostrar esto, llevó el álbum de fotos de su casamiento en el que se encuentran fotos de él y su familia con Mazzaro y varios integrantes de la barra de Boca, conocida como “la 12”.
En esas cinco horas de ampliación indagatoria también contó otros detalles de su vinculación con el resto de la barrabrava xeneize y de la relación de esta con la dirigencia.
Asimismo, aseguró que si ve a Mazzaro, tiene algún ontacto o sabe cómo y donde ubicarlo, se lo informará inmediatamente a la Justicia.
De la mano de sus nuevos abogados, Oliver Tezanos y Angel Moyano, el arquero cambió su estrategia y, luego de poner como garantía varias de sus propiedades, pudo recuperar su libertad.
