En el día de ayer, el vicepresidente del Consejo de Ministros aseguró la paulatina desregulación de empresas del Estado y reformas más complejas durante el próximo año y medio. Anuncian nueva fase de reformas en Cuba.

 

“Durante lo que queda de 2013 y el año 2014, trabajaremos en las más profundas transformaciones”, anunció en el día de ayer el vicepresidente del Consejo de Ministros de Cuba, Marino Murillo, quien también preside la comisión encargada de poner en marcha los lineamientos de la nueva política social y económica formulada por Raúl Castro años atrás. En este sentido, se implementarán durante el próximo año y medio una paulatina desregulación de empresas del Estado, así como también un cierto estímulo a la inversión extranjera, aunque sólo la que aporte a la isla tecnología o financiamiento.

“La primera etapa de las reformas ha sido hasta ahora, fundamentalmente, la eliminación de las prohibiciones en la sociedad”, ha dicho Murillo en conferencia de prensa. El próximo paso, según el Gobierno cubano es darle una mayor autonomía a las empresas estatales en función de “eliminar todos los impedimentos que ponen freno a sus posibilidades”. Aún así, aclararon que “el modelo por el cual apuesta la revolución y sus dirigentes se sustentará en la propiedad social y no en la empresa privada, aunque estas fomenten el empleo”.

El proceso de descentralización pasa por permitir que las empresas estatales se queden con el 50% de sus ganancias para ser reinvertidas en el proceso de producción del modo en que lo consideren; decisiones que antes eran tomadas en su totalidad por el Estado.

Asimismo, se ha hecho hincapié en la apertura a la inversión extranjera, aunque no a cualquier costo. “Sabemos que la isla debe atraer más inversión extranjera”, admitió Murillo, aunque aclaró que solo abrirán las puertas a aquellas empresas dispuestas a transferir tecnología y aportar financiamiento o empleo a la economía de la isla.

Comentarios

comentarios