Milagro Sala se encuentra detenida desde el último 16 de enero por otra causa: organismos internacionales le vienen exigiendo al gobierno su libertad.

El juicio en el que hoy se dictó la sentencia fue iniciado a partir de una denuncia que le hizo el actual gobernador Gerardo Morales por ser la supuesta instigadora del “escrache” que sufrió en octubre de 2009: en esa oportunidad le tiraron huevos durante una actividad en el Consejo Superior de Ciencias Económicas.

Con el correr de los meses y en base a los testimonios de los que declararon, los jueces confirmaron que Milagro Sala no estuvo presente en dicho escrache. Sin embargo, se la acusó como “instigadora” en base a los dichos de un testigo.

“Siento mucho dolor interno por la injusticia que estamos viviendo, porque no robamos nada, hemos trabajado y dignificado a miles de compañeros. Ese fue nuestro pecado”, aseguró frente al tribunal antes de que se conozca la sentencia.

En este marco, y luego de los incidentes y la represión que se produjeron en la última semana, la Fiscalía pidió 3 años de prisión condicional para la líder de la Tupac Amaru, mientras que la querella solicitó 8 años de pena de cumplimiento efectivo, el máximo previsto en el Código Penal.

En la lectura de la sentencia, el Tribunal Oral Federal 1 de Jujuy convalidó el pedido de la Fiscalía: la absolvieron por “amenazas” pero la encontraron culpable de ser la “instigadora” del escrache y, por ende, la condenaron a tres años de prisión en suspenso por “daño agravado”. Su defensa confirmó que apelarán la medida.

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