Por el postergado de la fecha n°22, River y Atlético Tucumán tenían que verse las caras este miércoles por la noche en la cancha del “Decano”.

El partido para el conjunto “millonario” tenía un cierto olor a final: de ganar quedaba a un punto de Boca Juniors en el torneo; en caso de no sumar de a tres, el equipo de Guillermo Barros Schelotto tendría más aire para encarar los cuatro partidos que quedan del campeonato.

El partido comenzó con la intensidad que prometía: a los 48 segundos una pelota quedó dando vueltas en la puerta del área del equipo local y Moreira lo aprovechó. El lateral de River fulminó a Luchetti para poner el 1 a 0.

El equipo visitante siguió dominando durante los primeros minutos y Atlético Tucumán acusaba haber sentido el impacto de la rapidez de la apertura del marcador. Sin embargo, con el correr de los minutos, el “Decano” empezó a crecer futbolísticamente.

A los 27 llegó una jugada polémica: tras una hermosa jugada colectiva que Álvarez coronó con una exquisitez, Aliendro quedó sólo frente a Batalla y definió con calidad a la red. No obstante, el juez de línea ahogó los gritos de gol levantando la bandera ante un offisde que si fue, fue por centímetros.

El encuentro se volvió más trabado, discutido y peleado a partir de ahí: en el barullo, River volvió a serenarse y a recobrar la pelota como en el primer tramo, inquietando a Luchetti en un par de oportunidades. Lucas Alario, incluso, llegó a convertir un gol pero fue bien anulado por el árbitro.

El segundo tiempo arrancó movido: en menos de cinco minutos, Atlético Tucumán tuvo una chance clara para empatarlo y, de contragolpe, Alario se durmió al quedar frente a Luchetti y, en el rebote, le hicieron una falta al “Pity” Martínez en la puerta del área. El “9” agarró la pelota y sacó un remate tremendo que se estrelló en el palo y salió.

El partido se volvió de ida y vuelta, con el “Decano” algo más incisivo: la falta de pericia de los delanteros locales y una buena tapada de Augusto Batalla a Leandro Fernández evitaron que cambie el resultado.

En la segunda que River agarró mal parado a Atlético Tucumán inclinó la cancha: entre Ponzio y el “Pity” Martínez elucubraron una linda jugada que Driussi, con rebotes y pifies de Canuto en el medio, terminó por coronar en la red.

Con el equipo de Lavallén completamente desorientado, los de Marcelo Gallardo empezaron a hacer de las suyas: otro contragolpe terminó con el ex jugador de Huracán sólo frente a Luchetti y, como suele hacerlo, el “Pity” Martínez definió con clase para sentenciar el encuentro.

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