La crisis económica que atraviesa la Argentina en los últimos años se vio profundizada por los efectos de la pandemia del coronavirus: mire para donde se mire, todos los indicadores son preocupantes y la pobreza se palpa en las calles.
Según datos del Ministerio de Desarrollo Social de la Ciudad de Buenos Aires, en el mes de mayo 122 mil personas asistieron a comedores sociales al no poder afrontar dicho gasto básico para la vida cotidiana.
Pero el número no se detiene ahí: 12 mil personas se alimentaron en los Centros de Primera Infancia (CPI) y jardines de infantes, otras 27 mil personas recibieron bolsones a través de escuelas, 8.500 adultos mayores recibieron también bolsones de comida y 104.098 personas percibieron beneficios a través de “Ciudadanía Porteña”.
“En total, el gobierno asiste alimentariamente a poco más de 273 mil personas, el 9,1% de la población“, indicó el periodista Franco Spinetta en su publicación en el portal “Diario Z”.
Aunque desde las organizaciones sociales vienen reclamando desde hace tiempo la deficitaria ayuda que reciben por parte de la administración de Horacio Rodríguez Larreta, que el propio oficialismo reconozca que durante el último mes más de 273 mil personas recibieron ayuda para acceder a los alimentos básicos puede darnos una idea cabal del difícil panorama que atraviesan los porteños y las porteñas.
Vale la pena recordar que el último informe de la Dirección General de Estadísticas y Censos (DGEyC) indicó que una familia tipo porteña necesitó $61.582 en el mes de abril para no caer debajo de la línea de la pobreza y $32.798 para no caer en la indigencia.