A pesar de los intentos de poner paños fríos, la interna del PRO por el desdoblamiento de las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires sigue al rojo vivo. La diputada nacional de Juntos por el Cambio, María Eugenia Vidal, intentó en las últimas horas desdramatizar las diferencias que se abrieron con Horacio Rodríguez Larreta pero también aprovechó para pasarle factura.
“Estoy en desacuerdo con la decisión de Horacio, no es una ruptura. Le manifesté mi desacuerdo a Horacio antes de que tomara la decisión, fue una decisión que no comparto. Horacio sabía de mi desacuerdo”, aseveró en diálogo con la prensa.
“Juntos por el Cambio y el PRO no nacieron para hacer un show y estar de discusión en discusión para ver a quién le toca un cargo. Cuestiono las ambiciones personales de algunos dirigentes”, prosiguió.
Y agregó: “No voy a ser cómplice de eso. No es una forma de mostrar que estamos comprometidos. Tampoco me parece bien que un candidato descalifique a otro”.
Por último, volvió a hablar sobre el alcalde porteño: “Esta cuestión tampoco pondrá en juego la amistad que tengo con Horacio desde hace más de 20 años. Esto se tiene que vivir como un aprendizaje. El mayor problema que tienen los argentinos es ver un muro negro a futuro. Si la política ofrece esta discusión, me enoja. Pero no voy a hacer nada que dañe al PRO ni a Juntos por el Cambio. La Argentina que viene es difícil y requiere experiencia”.
