Son tantos los decretos y las leyes que intenta modificar el gobierno nacional a través del DNU y la “Ley Ómnibus” que cuesta seguirles el paso: ahora se conoció que en el último “mega paquete” que envió el Poder Ejecutivo al Congreso de la Nación se pondrán en suspenso los aumentos jubilatorios y de otras prestaciones sociales.
Entre otros puntos, el presidente Javier Milei busca la suspensión de la actual fórmula de movilidad que actualiza las jubilaciones y otras prestaciones sociales cada tres meses para poder realizar aumentos por decreto hasta que se establezca un nuevo mecanismo de revisión automática.
El artículo 106 de la norma suspende la aplicación del artículo 32 de la Ley 24.241 que establece la movilidad de los haberes por jubilaciones y pensiones, de la que también dependen, por ejemplo, la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Asignación por Embarazo. También se suspende la vigencia para prestación básica universal, la compensatoria, el retiro por invalidez, por fallecimiento y por permanencia.
Y consignaron: “Hasta tanto se establezca una fórmula automática, el Poder ejecutivo nacional podrá realizar aumentos periódicos atendiendo prioritariamente a los beneficiarios de más bajos ingresos”.
Vale la pena subrayar que la medida es clave para el ajuste fiscal que viene encarando el titular del Ministerio de Economía, Luis Caputo, en función de “desindexar” estas prestaciones de la inflación y los salarios, siendo uno de los componentes más importantes del gasto público. Además, es una vieja medida de la receta que propone el Fondo Monetario Internacional (FMI) en sus programas de ajuste.
