Alrededor de las 4 de la mañana, aterrizó en el Aeroparque Internacional Jorge Newbery el avión sanitario que trasladó desde Jamaica a Ana María Arroyos, la turista argentina que se enfermó durante un crucero y terminó en coma farmacológico en Kingston.
La mujer, de 49 años y empleada del Banco Ciudad, fue trasladada rápidamente al hospital Finochietto donde actualmente permanece en terapia intensiva y es evaluada por un grupo de médicos expertos.
“Su situación sigue siendo crítica. Hay una junta de médicos evaluándola, están con todos los estudios. Está en terapia intensiva porque sigue en coma inducido. Los médicos aguardan los resultados de los estudios”, explicó Guillermo, su pareja.
Sobre la compañía de cruceros en la que viajaba la mujer, agregó: “La bajaron cual perro del barco y la dejaron tirada en una ambulancia por la fuerza, quitándole el derecho a todo. La responsabilidad fue de toda la tripulación. El lugar donde estaba internada era paupérrimo, una cama al lado de la otra. Tenía una infección en el abdomen que le llegó a los pulmones y casi la mata”.
