En su habitual columna en el diario La Nación, Emanuel Ginóbili se refirió a la posibilidad efectiva de retirarse del básquet, el pedido de Popovich y la decisión que deberá tomar de acá a un mes.

Ginobili

  • “Sé que muchos están pendientes de qué puede pasar con mi carrera. La verdad es que estoy agradecido por todas las palabras de reconocimiento y de afecto que me acercaron. Si bien no soy alguien que lee tanto, vi comentarios lindos que a uno lo hacen sentir muy bien. Te pueden decir que juegues un año más, que todavía estás bien… pero no pasa por ahí, va más allá de si puedo o no. Es cómo lo sentís o cuánto te cuesta armar el bolsito para ir a cada una de las ciudades o jugar cinco partidos en una semana. O jugar 85 partidos en 165 días. Así que es un momento de incertidumbre”.
  • “Hay momentos que repaso la temporada y me digo, cómo no voy a jugar un poco más y hay otros instantes en los que no quiero ver una pelota ni cerca. Voy a esperar este mes y ver cómo me siento. Si me siento como un ex jugador o no. Si empiezo a extrañar o cómo lo siente mi cuerpo. Es un momento único, nunca estuve en esta situación. Fugazmente lo pensé en 2013, pero a la semana o a los 10 días sabía que quería tomar otro desafío y que no era ese el momento. Ahora vamos a ver, quizás ahora pasa lo mismo o me cuesta mucho más y tengo que esperar más tiempo. Así que veré con tranquilidad qué hago, porque no son decisiones que uno tenga que tomar apurado”.

Ginobili II

  • “Dejar de hacer lo que hiciste el 100% de tu vida adulta es un momento único, que da un montón de incertidumbre. Seguro que no tengo procesado el retiro, porque uno tiene un momento de dudas, porque por momentos creo que es el tiempo y en otros que no. Me acuerdo que cuando le llegó el tiempo a mi hermano, Sepo, él tenía 39 años, empezó la temporada y sintió que no podía afrontarla, lo tenía mejor digerido. Yo definitivamente tengo muchas más dudas, aunque en general soy de pensar más todas las situaciones y las cosas. Por eso me quiero dar un tiempo”.
  • “Pop dijo que nos quería a Tim y a mí en la próxima temporada. Son palabras que me hacen las cosas más difíciles. La verdad es que si en la franquicia hubiesen manifestado que no me querían o que era momento de reconstruir y que querían un equipo más joven, me hubiesen facilitado la tarea enormemente. Es posible que hubiese terminado un poco herido porque por más que uno esté en la cornisa, quiere caerse sólo, no que te den el empujón. Así que hubiese dolido un poquito pero hubiese facilitado la decisión. Pasó al revés, esas palabras te ayudan en lo emotivo, en confianza, en sentimiento, pero no estoy en un momento en el que necesito el trabajo. No pasa por sentir que si me quieren sigo, sino de definir si realmente tengo ganas de hacerlo y meterme en todo ese trajín”.

Comentarios

comentarios