Según la agencia de refugiados de las Naciones Unidas (ONU), el gobierno húngaro puso a disposición varios trenes para cargar a miles de refugiados y dejarlos en la frontera con Austria.

A migrant family gets on the train travelling to Austria and Germany at the Eastern (Keleti) railway station in Budapest on August 31, 2015. The EU is grappling with an unprecedented influx of people fleeing war, repression and poverty in what the bloc has described as its worst refugee crisis in 50 years.  AFP PHOTO / ATTILA KISBENEDEK

A partir de este 15 de septiembre entrará en vigencia un paquete de leyes y medidas que criminalizan la entrada de refugiados y migrantes a Hungría, al mismo tiempo que se endurecen las penas para aquellos que intenten hacerlo de todos modos.

Según consignaron los agentes de la ONU, el gobierno local puso a disposición en las últimas horas varios trenes para vaciar los campos de refugiados del sur del país.

A través de un viaje de alrededor de cuatro horas, miles y miles de refugiados fueron cargados en los vagones y enviados a la frontera con Austria, que ya anunció el fortalecimiento de su frontera con mayor presencia policial.

Según las autoridades austríacas, el último domingo arribaron más de catorce mil personas provenientes de Hungría mientras que se esperan más de diez mil para el final del día.

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