El equipo de Pablo Guede derrotó por 4 a 0 a Boca en el Estadio “Mario Alberto Kempes”: el “Ciclón” se quedó por primera vez con la Supercopa Argentina.

CASLA

El conjunto dirigido por el “Vasco” Arruabarrena tuvo un traspié importante en la noche cordobesa y, en el ojo de la tormenta desde hace varios días por el pobre funcionamiento del equipo, quedó al borde del abismo.

Era un partido parejo hasta que Belluschi sacó un zapatazo desde fuera del área al que Orión no pudo ni siquiera rozar: a partir de allí San Lorenzo fue certero y preciso en cada ataque para liquidar al rival.

Boca estuvo lejos de tener una noche aceptable, sin poder generar juego y con pocas llegadas al arco rival. Mientras tanto, los delanteros del “Ciclón” complicaban por todos lados a su defensa.

Dos golazos de Pablo Barrientos (incluida una joya de tiro libre) y la última definición a la red de Nicolás Blandi terminaron por sentenciar el encuentro.

Pese a que ambos entrenadores venían siendo cuestionados por el periodismo y sus hinchas debido a los malos resultados del 2016, nadie suponía que la ventaja obtenida por cualquiera de los dos equipos pudiera ser tan amplia.

La dura derrota puso al “Vasco” Arruabarrena entre las cuerdas: se reunirá con Daniel Angelici quien ya había adelantado su “respaldo” para con el trabajo del entrenador. Sin embargo, es sabido en el mundo del fútbol que cuando los dirigentes comienzan a respaldar públicamente a un técnico es que tiene sellada buena parte de su salida: ¿seguirá el ex Tigre al frente de Boca?

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