Trabajadores estatales y sindicatos adheridos a la protesta llevan adelante la primera medida de fuerza de carácter nacional contra el gobierno de Mauricio Macri.

ATE

La Asociación Trabajadores del Estado (ATE), las Centrales de los Trabajadores Argentinos (CTA) de Hugo Yasky y la Autónoma (CTAA) de Pablo Micheli; junto a otros sindicatos adheridos y organizaciones sociales comenzaron con el paro y la jornada nacional de protesta.

Las CTA nacionales y provinciales paralizaron sus tareas y acompañan a los estatales en rechazo de “los despidos producidos en los sectores público y privado”, por “las inmediatas reincorporaciones”, contra la imposición de “un techo en las paritarias” y en demanda de “la eliminación del impuesto a las Ganancias sobre los salarios”, entre otras reivindicaciones.

El día comenzó con el MAS y el PTS desafiando el nuevo protocolo y cortando la intersección de las calles Callao y Corrientes a las 7 de la mañana. Luego se movilizaron a otras arterias del microcentro porteño.

“Este protocolo habilita a las fuerzas de seguridad a reprimir sin orden judicial basándose en el artículo 194 del Código Penal impuesto por la dictadura de Onganía”, aseguró la diputada nacional Myriam Bregman.

Los distintos gremios también rechazaron el “Protocolo de Seguridad” aprobado por el Ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich ya que implica “criminalizar la protesta”. Los dirigientes también pidieron la derogación de la “Ley Antiterrorista” kirchnerista.

Pese a esto último, el titular de ATE, “Cachorro” Godoy, se despegó de los cortes de calle llevados adelante por la izquierda: “El protocolo antipiquetes es un instrumento anticonstitucional pero nosotros no estamos cortando calles; sí hay movilizaciones a lo largo y a lo ancho del país, en todas las capitales provinciales”.

La jornada nacional de lucha se cumple también en 78 hospitales públicos bonaerenses y en las dependencias judiciales de la provincia de Buenos Aires.

“Las consignas son varias: no a los despidos y reincorporaciones en el sector público y privado y rechazo a esa situación en las pequeñas y medianas empresas, asfixiadas por la inflación y la apertura indiscriminada de las importaciones”, resumió el secretario general de la CTA bonaerense y titular del SUTEBA, Roberto Baradel.

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