Los ataques terroristas se produjeron en el aeropuerto internacional de la capital belga y en un vagón del subterráneo de la ciudad.

Belgica

Las explosiones en Bruselas se produjeron en simultáneo: según los testigos, las dos primeras se registraron a las 08.15 horas en el aeropuerto de Zaventem, situado a unos 11 kilómetros al noreste de Bruselas.

“No tienen idea de lo que pasó ahí. Hay cuerpos por todos lados”, exclamó uno de los testigos ante la mirada de los periodistas y policías que llegaban al lugar.

Las dos detonaciones en el aeropuerto y en el ataque en la estación de metro de Maalbeek provocaron, hasta el momento, la muerte de 34 personas.

Al menos por el momento, el numero de heridos en el ataque al subterráneo es de 55, mientras que en el primero el número de personas lastimas asciende a 81.

Las versiones en torno a lo sucedido aún no fueron esclarecidas: las primeras informaciones hablaban sobre un terrorista suicida pero medios belgas afirman que hubo “disparos y gritos en árabe” antes de las explosiones.

La agencia de noticias “Amaq”, alineada con el Estado Islámico (ISIS), confirmó a través de un comunicado su responsabilidad en los atentados de Bruselas.

En esta línea, voceros de ISIS aseveraron que “combatientes” con “una serie de artefactos y cinturones explosivos” llevaron adelante los atentados. Asimismo, señalaron que un hombre-bomba fue quien se hizo cargo del ataque en la estación de Maalbeek.

Las autoridades pidieron automáticamente a la población que no se mueva del lugar en el que se encuentra, que no salgan de sus casas ni de sus centros de trabajo.

Las fuerzas de seguridad belgas también encontraron un cinturón explosivo en el aeropuerto, que correspondería a un tercer atacante que no se atrevió a suicidarse.

Luego de algunas horas de incertidumbre, la policía local difundió una foto en el aeropuerto de tres sospechosos de haber participado en el atentado:

Vale la pena recordar que hace algunos días atrás, Salah Abdeslam, uno de los ideólogos y perpetradores de los ataques en París, fue herido de bala y apresado luego de que la policía realizara un operativo en el barrio de Molenbeek, en Bruselas.

En el interrogatorio al que fue sometido tras su detención, Abdeslam confirmó que estaban planeando atentados en la capital belga: nadie supuso que los mismos serían cometidos con tanta proximidad.

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