Envuelto en la tristeza por la dura derrota en manos del “Canalla”, el delantero avizora un futuro lejos de Boca y, tal vez, fuera del fútbol profesional.

tevez

Al igual que en los días posteriores a la derrota con Independiente Del Valle por las semifinales de la Copa Libertadores de América, la incertidumbre se cernió sobre el presente y el futuro de Carlos Tévez.

El “Apache”, dolido por la eliminación de la Copa Argentina en manos de Rosario Central y la consecuente imposibilidad de jugar la próxima edición del certamen continental, volvió a poner en duda su continuidad en el conjunto “xeneize”.

Desgastado por la presión, cansado de ser el punto de las críticas y las exigencias de hinchas, dirigentes y periodistas, la situación del ex atacante de la Juventus y el Manchester City es delicada: por lo pronto, acusó una molestia en una de sus piernas para no participar del entrenamiento matutino y no se sabe si jugará ante Gimnasia y Esgrima de La Plata en el “Bosque”.

Mientras tanto, Tévez sigue cosechando elogios y pedidos de que siga por referentes del denominado “Mundo Boca”. Daniel Angelici, presidente del club, apuntó: “Se hablan tantas cosas. Esperemos que Carlos se quede por mucho tiempo porque lo necesitamos”.

Hasta Diego Maradona salió a bancarlo: “A Carlitos solo puedo decirle que lo amo y darle las gracias por volver a Argentina cuando tenía 10 países para irse. Hoy no existe ningún nombre y apellido que sea más grande que el de Carlos Tevez. Lo único que les pido es que no le rompan las pelotas, que lo dejen jugar”.

¿Se quedará?

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