Luego de una batalla de varias horas en el “Rod Laver Arena”, el español se impuso ante el búlgaro por 6/3, 5/7, 7/6, 6/7 y 6/4.

En un partido extenuante e intenso, el español tuvo un escollo difícil de superar ante el búlgaro Grigor Dimitrov, una de las “revelaciones” del torneo pero lo logró.

El oriundo de Mallorca remontó momentos críticos a lo largo del match pero con el coraje que lo caracteriza logró sacarlo adelante: terminó llevándose el encuentro por 6/3, 5/7, 7/6, 6/7 y 6/4.

Rafael Nadal logró entonces acceder a la final del primer gran torneo del año, donde llegó por última vez en 2014: ya ganó el torneo australiano en 2009 y la sequía de Grand Slams se remonta al Roland Garros del 2014.

En la final, para colmo, espera la leyenda Roger Federer, quien tras estar seis meses inactivo mostró un tenis superlativo para volver a deleitar a los espectadores. Las emociones para el domingo están aseguradas.

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