Tras patear el penal en el último minuto ante Banfield y fallarlo, el volante se agarró la cabeza y le pidió perdón a los hinchas: recibió una ovación. Así de emotivo fue el último partido de Néstor Ortigoza en el “Nuevo Gasómetro”.

“Me voy bien, pasó todo muy rápido. Es complicado, me encariñé mucho con el público. En San Lorenzo crecí como persona, desde que pisé el club por primera vez”, aseveró en la entrevista post partido.

Sobre esa jugada en particular, el mismo “Orti” reconoció: “Estaba muy nervioso y sobresaltado, el partido no había sido fácil”.

“Me iré tras el partido con Talleres, es mi última semana. No hay chances de quedarme, tomé la decisión luego de la última reunión. Hice mi duelo en la concentración. No quería llorar, siempre quise partir con una sonrisa. Me voy por la puerta grande. Me despedí de la cancha de San Lorenzo como yo quería, me llevo una gran alegría”, remató.

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