Sin una solidez argumentativa y con los mismos recursos retóricos de algunos funcionarios del gobierno, Oscar Aguad celebró la fusión de Cablevisión y Telecom.

El titular del Ministerio de Comunicaciones, en diálogo con LN+, no sólo afirmó que la misma “es muy buena para el país” sino que, además, dijo que será “beneficioso” para el usuario.

“Argentina tiene un mercado bastante adormecido, con tres empresas que cada uno tiene el 33% del mercado y con pocas inversiones, esto impidió una buena conectividad y precios bajos. Era necesario crear un mercado competitivo e incorporar un cuarto operador al sistema”, explicó el ministro.

“No puede haber una empresa dominante por sobre las otras, es cierto que le permitirá dar el cuádruple play, la demás deberán apurar sus inversiones. Creemos que esto mejorará el servicio, los precios y la conectividad. (…) No son buenas las comunicaciones en Argentina porque no hay un mercado competitivo”, remató Aguad.

No son pocos los análisis que contradicen las extrañas conclusiones a las que llegó el funcionario. Uno de los mayores especialistas sobre el tema en el país, Martín Becerra, que es investigador del Conicet y Dr. en Ciencias de la Comunicaicón, aseguró en un post de su blog que el episodio marca “un hito en la concentración de los mercados de información y comunicación de la Argentina y supera todos los niveles previos, que ya eran elevados”.

“El nuevo conglomerado infocomunicacional será el mayor de la Argentina y concentrará el 42% de la telefonía fija; el 34% de la telefonía móvil; el 56% de las conexiones a Internet por banda ancha fija; el 35% de conectividad móvil; y el 40% tv paga”, agregó.

Con estos números, resulta más que difícil comprender cómo la concentración favorecerá “la competencia y las inversiones”: sería un caso más que novedoso.

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