Dentro de la tranquilidad y alegría que suele reinar en River desde que Marcelo Gallardo agarró el timón del equipo en 2014, los momentos más álgidos en el plano futbolístico pasaron por la seguridad en el arco.

Augusto Batalla, promesa “millonaria” y sindicado por el mismo entrenador como el sucesor natural de Marcelo Barovero, no rindió como esperaban en Núñez. El “1” falló en varios partidos importantes y los hinchas hicieron saber su descontento.

Aunque nunca lo criticó ante la prensa, la llegada de Germán Lux como refuerzo fue un claro mensaje: el juvenil ya no tendría el puesto asegurado.

La primera prueba de ello ocurrió en las últimas horas: en el amistoso ante el Orlando City, el experimentado arquero fue el encargado de atajar para los titulares mientras que Batalla lo hizo para los suplentes.

Por ahora no hay confirmación de que esa sea la idea que mantendrá Gallardo de cara a lo que se viene pero, si no es una advertencia, sí es un claro indicio de que priorizará rendimientos y nivel.

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