La investigación llevada a cabo por cientos de periodistas de todo el mundo causó un terremoto político: la gran mayoría de los funcionarios que se vieron involucrados en distintos países del planeta renunciaron a sus cargos o fueron desplazados.

En la Argentina, sin embargo, el asunto tomó rápidamente un cariz judicial y, casi un año y medio después, la Cámara Federal comunicó el cierre de la causa contra Mauricio Macri por “lavado de dinero”.

De esta manera, la Sala II coincidió en su posición con la del fiscal Germán Moldes: ambos habían descartado esa figura al analizar la participación accionaria del mandatario en las soeciedades off shore Fleg “Trading” y “Kagemusha”.

Sin embargo, el asunto no terminó del todo para el presidente. Los magistrados giraron parte del expediente para que se investigue la posible comisión de otro delito, “evasión tributaria”, en el fuero Penal Económico; mientras que otra parte seguirá en manos de la Justicia de Instrucción por las supuestas inconsistencias en declaraciones juradas.

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