Díaz Gilligan, subsecretario general de Presidencia de la Nación y vocal de River Plate, vendió “Line Action” el 3 de noviembre de 2014, once meses después de desembarcar en el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires: poco menos de cuatro años más tarde, “El País” sacó a la luz un entramado de dinero en dólares, sociedades offshore y cuentas poco claras.

Según los periodistas que difundieron la noticia, el funcionario ocultó 1,2 millones de dólares (980.000 euros) en Andorra. El dinero permaneció en una cuenta en la Banca Privada d’Andorra (BPA) a nombre de una sociedad inglesa que, también, se dedicaba a la compra y venta de jugadores de fútbol. Díaz Gilligan figuró ante el banco como representante de la empresa y accionista pero él dice que los fondos no eran suyos.

Fernando De Andreis, Secretario General de la Presidencia de la Nación, salió a dar explicaciones y defendió al funcionario: “Es una situación entre privados. No tiene una empresa offshore, fue asesor de varias empresas en su vida. Es una situación previa de que fuera funcionario, es una situación de índole privada”.

“Está todo a disposición de la Justicia y la Oficina Anticorrupción. Estamos tranquilos con las explicaciones que viene dando Díaz Gilligan”, concluyó.

Comentarios

comentarios