A través de un escueto comunicado, el Hospital “Héctor Quintana” de San Salvador de Jujuy informó el martes por la noche que murió la bebé nacida el viernes pasado tras la cesárea que le practicaron a una nena de 12 años que había sido violada por un vecino de 50 años.

Pese a que tanto la menor como su madre habían pedido por escrito que se active el protocolo de ILE (Interrupción Legal del Embarazo), tanto los médicos del hospital como las autoridades provinciales se negaron a hacerlo con el pretexto de “salvarles la vida”.

Por ello, en su momento, los doctores plantearon la necesidad de practicarle una cesárea, “dada la baja edad cronológica de la nena y la alta edad gestacional del feto”.

Aunque en un primer momento la maniobra quirúrgica fue “celebrada” por quienes rechazan el #AbortoLegal, menos de una semana después la medida se mostró ineficiente: no sólo murió la beba, sino que la niña violada ahora también sufrirá dolorosas consecuencias físicas y psicológicas por haberla forzado a pasar por dicha situación.

La repercusión y las críticas en las redes sociales

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