Pasó Ed Sheeran, pasó Luis Miguel, pasó Hernán Cattaneo (DJ) y las quejas de los vecinos por el caos de tránsito y la contaminación sonora empezaron a inquietar a los organizadores de los shows.

Este lunes el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) tomó cartas en el asunto y clausuró el Campo de Polo por “superar la intensidad de sonido permitida”.

En la medición que se realizó dentro del estadio y en dos de los cinco puntos externos donde se midió el ruido, había alcanzado niveles no permitidos por la ley.

Desde la Agencia de Protección Ambiental (APRA)porteña informaron que se trata de una clausura preventiva “por la actividad de música y canto en vivo” a partir de la cual se establece una multa por haber excedido el límite de decibeles estipulado por ley.

En dos semanas tiene que tocar Paul McCartney. Para levantar la sanción, los organizadores  deben “presentar un descargo y pagar una multa por haber excedido el límite de decibeles estipulado por ley”.

¿Llegará la habilitación a tiempo para el show del beatle?

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