Jefes de Servicio, trabajadores profesionales de la salud, pacientes y organizaciones sociales y sindicales vinculadas con el Hospital Garrahan volvieron a reclamar contra el ajuste presupuestario.
En el año 2014, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires achicó el presupuesto del Hospital Garrahan en 113 millones de pesos. Lejos de quedarse allí, la administración Macri fue por más: en 2015, duplicó la quita hasta alcanzar los 226 millones de pesos. Y, para colmo, el último 27 de agosto establecieron, además, “el recorte de 114 millones sobre el aumento salarial correspondiente al segundo semestre del año”.
Ya en lo que concierne al presupuesto 2016, el PRO fue por más: en la sesión del último jueves se aprobaron recortes por 348 millones de pesos.
“Hasta ahora el gobierno venía subejecutando el presupuesto, pero en este caso se trata de un recorte explícito de un 20,3%, que va a impactar en obras de infraestructura, remodelación de quirófanos, renovación de equipos y ampliación del hospital de día oncológico” explicó Majo Martinez Cáceres, pediatra del hospital.
“El Hospital funciona los 365 días del año con el 100% de las camas cubiertas, cuando lo ideal es que lo haga con un 85%, para poder recibir derivaciones. Sólo el año pasado se rechazaron el 60% de esas derivaciones y eso es claramente una inequidad en el acceso”, agregó.
Este último jueves, además. la Justicia ordenó al GCBA “restituir al Hospital de Pediatría Garrahan la diferencia entre la partida destinada para 2015 y la suma que le hubiera correspondido asignar según el decreto ley 815, aprobado en 1989”. Pese a las promesas, la administración Macri aún no desembolsó el dinero adeudado.
