Pese a que desde el PRO, el FPV, Boca y distintos funcionarios públicos condenaron el ataque, los agresores todavía no fueron detenidos por la Justicia.
Desde un primer momento, las organizaciones sociales apuntaron contra Jorge Apreda – presidente de la “Comuna 4” que integran los barrios La Boca, Barracas, Parque Patricios y Nueva Pompeya – como el responsable de idear el ataque en el CGP ubicado en Avenida del Barco Centenera 2900.
Luego de la difusión de las imágenes de la agresión, confirmaron que Rodolfo Corzo es el hombre que aparece con un cuchillo en la mano amenazando a los presentes. Según revelaron desde el diario “Nueva Ciudad” a fines de la semana pasada, Corzo trabaja en el CGP de Parque Patricios, al igual que su padre quién es conocido cómo “El Cordobés”.
Los terrenos de Casa Amarilla estaban destinados a un uso social: están en manos privadas ??https://t.co/fh7nizW9kF pic.twitter.com/CwHIq2KcPa
— Diario BA (@diariodeBA) 6 de mayo de 2016
El último viernes, algunos diputados denunciaron los hechos desde la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires: “Intimamos a que se haga efectiva la detención de los agresores. Y decimos que la única hipótesis es que quien perpetró el intento de homicidio es una patota agresora que responde al PRO”, exigieron.
Nada de esto parece haber hecho reaccionar a las autoridades judiciales: por el momento Corzo sigue sin estar detenido. La disputa por los terrenos de Casa Amarilla están a flor de piel y el ataque deja vislumbrar que en el entramado de negocios detrás de la adjudicación “xeneize” hay muchas partes involucradas. ¿Hacía falta una muerte para que la investigación pase a mayores? ¿Cómo puede remendarse la situación de un predio originalmente destinado a viviendas sociales y que probablemente terminará albergando un nuevo estadio de fútbol?
