Cada crisis también es una oportunidad: una encuesta de la ONU arrojó que el 70% de los refugiados fue víctima de traficantes de personas en su periplo hacia Europa.

Refugiados II

Un relevamiento realizado por la Organización Internacional de la Migración (OIM) dependiende de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) arrojó que más del 70% de los migrantes que viajan por el Norte de África a Europa han sido víctimas del tráfico de humanos, del tráfico de órganos y de la explotación durante el camino.

Según las cifras difundidas por el organismo, casi tres cuartos de los entrevistados que llegaron por bote a suelo europeo reconocieron haber sido traficados y explotados por criminales en algún punto de su periplo. Además, casi el 49% admitió haber sido mantenidos cautivos contra su voluntad en algún sitio: la mayoría de las veces ocurrió en territorio libio.

La mitad de los refugiados consultados por la ONU también señalaron que tuvieron que trabajar para alguien sin que les pagaran, siendo amenazados con armas por sus “empleadores”: aceptar estas condiciones era la única manera de asegurarse un lugar en un bote para cruzar el Mar Mediterráneo y salir del encierro en que estaba sometido.

El negocio no está solo ahí: a partir de la crisis de refugiados, son varios los informes que confirman el aumento en la red de tráfico de sangre y órganos. Un 6% de los encuestados denunció haber sido forzado a donar sangre contra su voluntad o haber dado un órgano como parte de pago del viaje.

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