El sur de la Capital Federal y el conurbano, las zonas más postergadas y “calientes” del AMBA, verán reestructurada la forma en que las fuerzas de seguridad se despliegan en el territorio.

Hace algunos años atrás, y luego de varios hechos de inseguridad, el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner dispuso el “Operativo Centinela“, presentado por la entonces titular del Ministerio de Seguridad, Nilda Garré: en ese momento implicó el despliegue de 6000 efectivos de Gendarmería en el conurbano bonaerense.

Mientras tanto, se daba luz verde al programa “Cinturón Sur”, donde se dispuso que 2500 efectivos de la Gendarmería y Prefectura se desplegaran en barrios de la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires.

Ahora, el presidente Mauricio Macri, Marcos Peña y Patricia Bullrich decretaron su fin a través de un decreto publicado en el Boletín Oficial.

Según el gobierno, este programa “ha generando un mecanismo rígido de organización, con presencia estática y focalizada, sin alcanzar los objetivos pretendidos, y en virtud del cual se ha confundido la tarea policial con el accionar propio de las Fuerzas de Seguridad con una misión especializada”.

Por ello, a partir de ahora, la conducción de los cuerpos de seguridad y policiales, y su “implementación táctica y estratégica”, se articulará a través del Centro de Planeamiento y Control, que podrá ser convocado por el Ministerio de Seguridad “cuando lo estime necesario”.

En esta línea, Patricia Bullrich explicó: “Desde que firmamos el traspaso nosotros en la ciudad somos soporte, no la centralidad como era antes. Durante 2017 nos quedamos en todo el sur, pero puede que lo del norte lo realineemos, o que ocupemos más algunas zonas”.

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