El ataque y los destrozos en la redacción de “Tiempo Argentino” siguen dando que hablar: el presidente opinó del tema y Cristina Kirchner fue a visitar el edificio.

Macri

“Lo que pasó en Tiempo Argentino está lejos de la Argentina que queremos. Pero me alegra que la Justicia esté interviniendo, como lo hizo antes para pedir el desalojo del edificio”, señaló Mauricio Macri en diálogo con la prensa.

“O sea, está mal cualquier tipo de usurpación. Me parece peor todavía con el ejercicio de la violencia. Pero, claramente, nadie tiene derecho a usurpar lo que no es de uno”, agregó luego en referencia a los periodistas que allí se desempeñan.

Las declaraciones del actual primer mandatario no pueden ser más erróneas: hace algunos meses atrás, el mismo Ministerio de Trabajo le dio la potestad de seguir utilizando y ocupando el edificio a la cooperativa que agrupa a los trabajadores del diario.

Los dichos de Macri no son inocuos: esto podría sentar un pésimo precedente para todas las empresas recuperadas del país que, al menos hasta que la Justicia se expide sobre su situación (lo cual puede tardar varios años), se encuentran pendiendo de un hilo.

El último lunes, y con connivencia policial, un grupo de violentos echaron a las personas que se encontraban dentro del edificio, destrozaron pertenencias de los trabajadores y registros de la cooperativa en el sector de “Recursos Humanos”: también los golpearon con objetos contundentes.

Los miembros de la “patota” responden al empresario Mariano Martínez Rojas, quien se adjudica la compra del diario así como de Radio América, que fue también víctima del accionar de estos sujetos.

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